viernes, 19 de julio de 2013

El miedo. ¿miedo a qué?

¿Qué es el miedo? El miedo sólo puede existir con relación a algo, no aisladamente. ¿Cómo puedo tenerle miedo a la muerte, cómo puedo tener miedo de algo que no conozco? Sólo puedo tener miedo de algo que conozco. Cuando digo que la muerte me da miedo, ¿temo realmente a lo desconocido ‑o sea a la muerte- o tengo miedo de perder lo que he conocido? Mi miedo no es a la muerte, sino a perder mi asociación con las cosas que me pertenecen. Mi miedo existe siempre en relación con lo conocido, no con lo desconocido.
(Jiddu Krishnamurti)

Temo perder algo de lo que creo que tengo. 
¿pero que tengo yo en realidad? Sino mas que deseos. 
¿Si ni siquiera un pelo solo de mi cuerpo lo he hecho yo mismo? 
Todos los miedos están siempre relacionados con el miedo a la muerte física, esa muerte que disuelve todos esos problemas, esos asuntos que tanto nos preocupan hoy, que parecen tan importantes, todo eso que creemos que es nuestra vida personal, todo eso por lo cual hemos luchado tanto; cuando en realidad hay una sola vida: la vida. Y no depende de nosotros. Ni de nadie. 
En la muerte física muere el ego, mi historia y mi futuro personal.
Bienaventurado quien puede vivir en el eterno presente y se siente a si mismo como la misma vida, y la misma verdad.

Porque él vive en el paraíso. Es libre de todo miedo y por eso no juzga. No juzga a los demás, ni a si mismo, ni las circunstancias.

Es libre de si mismo. Y eso es algo que no tiene valor, ni comparación ni precio ni descripción.
Es absoluto.

Y es algo que nadie te podrá explicar ni dar, sino que tú mismo podrás experimentar en el momento que dejas todo lo que conoces, crees, tienes, anhelas, deseas, odias, supones, temes, etc. Todo. Todo concepto de la vida. Todas tus ideas. Cuando te rindes sin condiciones a lo que es. Cuando te entregas desnudo e inocente tal como has nacido a la vida.
En ese momento habrás muerto y habrás nacido a la vida real.
Lo valioso es hacerlo antes de nuestra muerte física. Para poder vivir libre y siendo la misma paz.
"La paz de Dios".
Y en vez de intentar con mucho esfuerzo por vivir tu vida de una manera tal como tu deseas que fuese, tu entrega y tu rendición harán que la vida misma te lleve en sus brazos dulces , murmurándote la canción divina al oído y en silencio.
Eterno.
Estarás enamorado de ti y de todos al mismo tiempo. Y de todo.
Lo cual es la vida.
Lo cual es vivir.

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