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martes, 20 de octubre de 2015

El amor perfecto

"El amor perfecto destierra el miedo.
Donde hay amor no hay ordenes
ni expectativas, no hay dependencia.

Si te quieres ir, no sentire pena por mi mismo,
disfruto inmensamente tu compañia
pero no estoy apegado"

Anthony de Mello

El maestro

El maestro hizo de su tarea destruir sistematicamente toda doctrina, toda creencia, todo concepto de lo divino. Porque estas cosas que fueron originalmente creadas como punteros ahora estaban siendo tomadas como descripciones.
El amaba citar esa frase del Oriente que dice “Cuando el sabio señala la luna, todo lo que el tonto ve es el dedo"

Anthony de Mello

sábado, 4 de abril de 2015

El patriostismo, una forma de estupidez.

Cómo nos libramos del nacionalismo?

Sólo comprendiendo plenamente lo que él implica, examinándolo, captando su significación en la acción externa e interna. En lo externo, él causa divisiones entre los hombres, clasificaciones, guerras y destrucción, lo cual es obvio para cualquiera que sea observador. En el fuero íntimo, psicológicamente, esta identificación con lo más grande, con la patria, con una idea, es evidentemente una forma de autoexpansión. Viviendo en una pequeña aldea, o en una gran ciudad, o donde sea, yo no soy nadie; pero si me identifico con lo más grande, con el país, si me llamo a mí mismo hindú, ello halaga mi vanidad, me brinda satisfacción, prestigio, una sensación de bienestar; y esa identificación con lo más grande, que es una necesidad psicológica para los que sienten que la expansión del "yo" es esencial, engendra asimismo conflicto, lucha entre los hombres. De suerte que el nacionalismo no sólo causa conflictos externos, sino frustraciones íntimas; y cuando uno comprende el nacionalismo, todo el proceso del nacionalismo, éste se desvanece. La comprensión del nacionalismo llega mediante la inteligencia. Es decir, observando cuidadosamente, penetrando el proceso integro del nacionalismo, del patriotismo, surge de ese examen la inteligencia; y entonces no se produce la substitución del nacionalismo por alguna otra cosa. En el momento en que reemplazáis el nacionalismo por la religión, la religión se convierte en otro medie, de autoexpansión, en una fuente más de ansiedad psicológica, en un medio de alimentarse uno mismo con una creencia. Por lo tanto, cualquier forma de substitución, por noble que sea, es una forma de ignorancia. Es como alguien que substituyera el fumar por la goma de mascar o el fruto del betel. En cambio, si uno comprende realmente, y en su totalidad, el problema del fumar, de los hábitos, sensaciones, de las exigencias psicológicas y todo lo demás, el vicio de fumar desaparece. Sólo podéis comprender cuando hay un desarrollo de la inteligencia, cuando la inteligencia funciona; y la inteligencia no funciona cuando hay substitución. La substitución es simplemente una forma de autosoborno, de incitaros a que no hagáis esto pero sí hagáis aquello. El nacionalismo ‑con su veneno, sus miserias y la lucha mundial que acarrea- sólo desaparece cuando hay inteligencia, y la inteligencia no surge por el mero hecho de pasar exámenes y estudiar libros. La inteligencia surge cuando comprendemos los problemas a medida que se presentan. Cuando hay comprensión del problema en sus diferentes niveles ‑no sólo en la parte externa sino de lo que él implica en su aspecto interno, psicológico-, entonces, en ese proceso, la inteligencia se manifiesta. Cuando hay, pues, inteligencia, no hay substitución; y cuando hay inteligencia desaparece el nacionalismo, el patriotismo, que es una forma de estupidez.

J. Krishnamurti

miércoles, 18 de junio de 2014

No es fácil...

"No es fácil"... 
Acaso te fue fácil aprender a caminar?... aún así has puesto tu mayor esfuerzo en hacerlo. Y cuanta valentía! si un sin fin de veces has caído, y las mismas veces te has levantado y vuelto a intentar. Alguna herida se ha producido en ese aprendizaje; alguna cicatriz marca a fuego el haberlo logrado, y al mirarla seguramente sientas gozo y satisfacción.
Por qué, entonces, no valoras de igual manera todas las cicatrices que te dejan las experiencias vividas? 
Cuando niños, no emplean el uso de la razón...  viven en la excelencia de la inocencia, la simpleza y la frescura de lo natural. Se actúa según sentimientos. Con el correr de los años, comienzan a ser racionales... especulan absolutamente con todo, consciente o inconscientemente. Y cuando se le da protagonismo a los "pensamientos", estos paralizan las emociones. 
Pero como te he dicho al principio, es una "caída"... debes levantarte e intentar actuar al compás de los latidos de tu corazón... esa es la perfecta sinfonía de tu vida. Sacúdete el polvo de tu vestimenta, acomódate el cabello, levanta la cabeza, suspira... vuélveme tu rostro y seca tus lágrimas, que también son plegarias, y se oírlas. Has un análisis sincero de las decisiones que has tomado, corrige tus errores y continua tu camino... 
Si en él te sorprende la lluvia, no busques refugio, permíteme purificarte. Si te sorprenden los vientos, no busques resguardo, permíteme acelerar tu paso. Si te sorprende la injusticia, no maldigas, permíteme enseñarte a ser justo. Si te sorprende el dolor, no te lamentes, permíteme hacerte ser mejor persona. 
En algún momento te sentirás agobiado, es el momento de detenerte a descansar... nunca dije que la marcha debería ser ininterrumpida. Hasta el soldado más aguerrido necesita recuperar energías. Descansa en mí, yo cumpliré mis promesas.
Cuando te encuentres en medio de una batalla, no temas, he puesto escudo y espada de victoria en tus manos. Jamás dudes de utilizar tu arma más poderosa, la verdad. Siempre sabrás cual es. Te he brindado el don del discernimiento.
Mantente humilde ante cualquier logro o descubrimiento, eso es de mi agrado.
Pregona mis principios, enseñanzas, y mandamientos.    
No estarás ajeno a la burla del ignorante, o a la del pensador, más no permitas que eso desvirtúe tu objetivo... te avergonzarás por momentos, lo sé! y lo acepto, más nunca me niegues para simpatizarles. 
Acude ante la necesidad del prójimo, en ocasiones salvarás vidas al hacerlo.
He puesto en tu corazón preceptos indispensables: EL AMOR, LA FE y EL PERDON. Como todo en tu vida, con la práctica irás mejorándolos día a día. 
No te encontrarás solo, poco a poco, se irán encontrando los unos a los otros... ámense, ese es su mayor legado, AMENSE. 

No es fácil... pero jamás dije que lo sería.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Hay 2 opciones. No se puede estar despierto y dormido al mismo tiempo.

Hay 2 opciones
1- o bien usas sus tus pensamientos y tu mente.
2- o bien eres usado por tus pensamientos y tu mente.

Un pensamiento es algo que aparece en ti, te roba tu atención y tu energía durante un rato, te distrae separándote de tu entorno, y luego se va. Te desconecta de la realidad inmediata, de todo lo que sucede a tu alrededor.
Es como si fuera un teléfono que suena, lo atendemos inmediatamente, escuchamos atentamente y nos creemos todo lo que nos dice.
Pero es un teléfono que suena 60.000 veces por día.
¡Cuánto trabajo!

Una creencia es un pensamiento que se quedó enquistado en la mente, y ahora hacemmos lo que sea por defenderlo.
¿Lo que sea? ¿Cualquier cosa?
Bueno, pensemos un momento. Por miedo la gente necesita creer en algo a cualquier precio.
Por miedo somos capaces de defender nuestras creencias hasta la muerte.
Por defender una creencia hemos matado a 262 millones de personas como tú y como yo, por defender creencias tales como por ejemplo nuestra patria o nuestro Dios.
¿Por qué somos capaces de matar o pelearnos a muerte con alguien?
Porque sentimos que esas creencias, esos pensamientos, esas opiniones acerca del mundo, de Dios, del sexo, de la política, sentimos que todo eso somos nosotros. Es decir estamos tan identificados con esos pensamientos que creemos que nosotros somos mismos. Sentimos que somos una colección de opiniones, ideas, teorías, pensamientos y dichos, entonces los defendemos como si estuvieramos defendiéndonos a nosotros mismos.
En una discusión, sentimos que si decimos: "Tienes razón, yo estaba equivocado" de alguna forma algo nuestro muere y se debilita.

El ego es la identificación con esos pensamientos.
Esta identificación crea un yo separado de la realidad, de la vida, de la existencia, de Dios (por ponerle otro nombre), y de los otros seres.
Sentimos que ese yo tiene una vida personal, individual, totalmente aislada del resto de la humanidad y del resto del universo, cuando en realidad la vida es una sola siendo nosotros la vida misma.
"Mi vida" no existe como tal, solo hay "vida". Yo no poseo una vida, la vida me posee a mí. Dicho mejor, no hay un "yo" a quién la vida posea, la vida soy yo. Directamente. Sin intermediarios. Yo soy vida. Somos vida. La vida es una.
Así como nuestro corazón late solo, nuestra digestión se hace sola, nuestro cabello crece solo, también nuestra mente piensa sola.
No podemos dejar de pensar. Pero podemos dejar de darle tanta importancia a esos llamados internos en forma de pensamiento que aparecen 60.000 veces cada día y nos quitan tanta energía.
Podemos ser conscientes que los pensamientos que se nos aparecen cada día son el resultado de nuestro pasado, de nuestra experiencia, nuestra educación, nuestros traumas, nuestros miedos, nuestros deseos y sobretodo todo lo que nos han dicho nuestros padres y quienes nos han criado. Esta programación a veces nos domina. Y de alguna forma nos posee.
Liberarse es la clave.
Liberarse de ese fantasma que no existe, porque en últimas instancias si te pido que me muestres tu yo, solo me hablarás de tu pasado, pero no me lo puedes enseñar porque no existe en la realidad. Porque es solo un conjunto de ideas.
Si dejamos de lado esa tremenda cantidad de ideas y opiniones formadas en el pasado, podemos salir de nuestro ilusorio mundo personal para encontrarnos con los demás en el único mundo que existe. El real.
Hay una sola Tierra, pero 8000 millones de mundos y así es imposible que nos llevemos bién, es imposible siquiera que podamos hablar y escuchar sin pasar a la defensa y al ataque. Así es imposible que vivamos en comuníón (común-unión).
Union viene de Uno, unirse es hacerse Uno.


Mariano Gringaus Urrutia




viernes, 27 de septiembre de 2013

Saber escuchar

Saber escuchar

1- El escuchar es un arte que no se obtiene fácilmente, pero en él hay belleza y gran comprensión. Escuchamos con distintas intensidades de nuestro ser, pero nuestro escuchar es siempre desde una idea preconcebida o desde un punto de vista particular. No escuchamos simplemente; se interpone siempre la pantalla de nuestros propios pensamientos, de nuestras conclusiones, de nuestros prejuicios, nuestra experiencia personal, creencias y opiniones. Para escuchar tiene que haber quietud interna, una atención relajada; hay que estar libre del esfuerzo de adquirir. Este estado alerta y, no obstante, pasivo, uno puede escuchar lo que está más allá de la conclusión verbal. Las palabras confunden; son sólo medios exteriores de comunicación; pero para comunicarnos más allá del ruido de las palabras, en el escuchar tiene que haber una pasividad alerta. Los que aman pueden escuchar; pero es extremadamente raro encontrar a alguien que escuche. Casi todos vamos tras resultados, queremos alcanzar metas; estamos siempre venciendo y conquistando; en consecuencia, no escuchamos.

La mayoría de nosotros estamos muy poco acostumbrados a escuchar. Si oímos cualquier cosa contraria a nuestra forma habitual de pensar, o si alguien desprecia uno de nuestros ideales favoritos, nos inquietamos de sobremanera.
Tenemos intereses creados en ciertas ideas y en ciertos ideales, al igual que los tenemos en nuestras propiedades y bienes materiales, y también en nuestra experiencia y conocimiento acumulados; y cuando se pone en tela de juicio cualquier cosa de éstas, perdemos el equilibrio y oponemos resistencia a todo lo que nos dicen.

2- Estamos tan identificados con nuestras opiniones y pensamientos que cuando algo los “toca", nos sentimos tocados o incluso amenazados. Nos sentimos heridos y atacados y entonces pasamos al modo defensa-ataque, y entramos en la lucha por defender un ideal, una creencia, una opinión, un pensamiento, tal como si estuviéramos defendiéndonos a nosotros mismos.
Algunos llegan a decir: "Es que estoy defendiendo la verdad!", pero la verdad no necesita defensores. La verdad sigue siendo la verdad aunque la tapen, nieguen o ignoren.

Te pido que escuches con una mano en el corazón, sin tratar de defender ni atacar lo que se dice. Escucha con neutralidad, con desnudez, con pureza.
Escucha sin elección. Escucha sin preferencias, sin pensamientos de por medio, sin otra intención mas que la de escuchar. Escucha sin filtros, sin intermediarios. Escucha directamente. Escucha con toda tu energía en el escuchar. Escucha con todo tu Ser.
Sólo cuando uno escucha así, oye la canción profunda de las palabras.
Escuchando en serena quietud, así podemos estar sentados, los 2, juntos, en comunión, siendo uno.
Eso es amor.
Eso es amar.

1- J. Krishnamurti
2- Mariano Gringaus


lunes, 2 de septiembre de 2013

La droga más poderosa del mundo. Otra joyita de 9 minutos.

Anthony de Mello aclara como se puede vivir con desapego, con amor.
Sin necesitar ser controlado mediante la aprobación-crítica de lo demás, y sin necesitar tampoco controlar a los demás.
Como llegar a ser libre de la exclavitud del autoestima.
Muy claro y divertido.

Me alegra haber descubierto, por casualidad, los videos de Anthony de Mello.
Una joyita!